Sus juegos de mesa para los más peques son simplemente preciosos, con un diseño muy cuidado y unas ilustraciones preciosas. En un mundo lleno de plástico y colores chillones, a nosotras nos encanta la ensencia artesanal de esta marca húngara. Su objetivo es crear juegos bonitos, y duraderos que pueda disfrutar toda la familia. Marbushka no sólo cuida su producción (todo está fabricado con materiales naturales y por supuesto completamente libre de explotación), si no que también cuida que sus proveedores y minoristas sean pequeñas empresas faniliares. Nosotras cuando les conocimos no pudimos más que enamorarnos.